Analizan medidas para protección de áreas terrestres y marinas del país

Para proteger al menos 30 por ciento de las áreas terrestres y marinas de México hacia 2030, se requiere que los programas gubernamentales contribuyan con mayores financiamientos y contemplen a las comunidades locales, señalaron este miércoles especialistas.

Durante el segundo día del Foro ABC para un México sustentable, convocado por Universidad del Valle de México y la Universidad Tecnológica de México, Mariana Bellot, coordinadora regional BIOFIN, indicó que México tiene institucionalizados los gastos destinados a la diversidad, y en los recientes años se han mostrados tanto picos altos y bajos sobre su presupuesto, lo que puede ayudar a coordinar los programas destinados a este rubro.

A nivel regional, señaló que del país destina 0.07 por ciento de su PIB (2023), cuando Cuba otorga 1.30 por ciento (2016), Guatemala 0.6 por ciento (2014), Costa Rica 0.5 por ciento (2018), Colombia 0.21 por ciento (2023) y Ecuador 0.12 por ciento (2025). Aclaró que la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos pide a sus integrantes destinar una parte de su PIB a este rubro.

Janeth Ugalde, integrante del Grupo de Financiamiento Climático para Latinoamérica y el Caribe, indicó que actualmente los recursos invertidos aún no son suficientes y las contribuciones actuales sólo están “alimentando la crisis climática” a nivel nacional, al igual que otros países.

A nivel global, apuntó que en la cumbre climática del año pasado, realizada en Bakú, Azerbaiyán, las potencias se comprometieron a destinar 300 mil millones de dólares a los países subdesarrollados, pero señaló que esos montos aún son insuficientes.

Bajo este escenario, José Antonio González Azuara, experto en política ambiental y conservación, urgió a repensar el sistema actual para la conservación de las áreas naturales, ya que “necesitamos dejar atrás la visión de conservación impuesta y transitar hacia un modelo donde las comunidades sean protagonistas. México tiene dos grandes patrimonios: el natural y el cultural. La conservación debe proteger a ambos”.

Daniel González Delgadillo

Fuente: La Jornada