Stephan Bibrowski nació en 1890 en Polonia y logró ser reconocido internacionalmente.
Su piel era real, solo que en lugar de destacar el órgano más extenso del cuerpo humano estaba cubierto con vello, su nombre era Lionel y nació con un raro defecto físico desde que era un recién nacido al estar totalmente cubierto de su rostro; sin embargo, aquel problema lo supo contrarrestar al ser un reconocido artista que fue querido por todo el mundo.
Stephan Bibrowski nació en 1890 en Wilczogóra, condado de Grójec, en el Congreso de Polonia. El polaco se distinguió desde que era un niño por la peculiaridad de que su cabeza estaba cubierta totalmente por cabello. Ya como un adulto, el cabello de Stephan siguió con su crecimiento hasta alcanzar una longitud de 20 centímetros en su cara y alrededor de 10 centímetros en el resto de su cuerpo.
El origen de “El hombre con cara de león”
Con tal característica, Stephan se convirtió en “Lionel el Hombre con Cara de León”, dado que su cabello largo y dorado lo hicieron emular a la cabellera de un león, ya que sus mechones no se diferenciaban de la melena del “rey de la selva”.
De manera que Lionel aprovechó su rara condición médica conocida como hipertricosis para ser una de las estrellas en presentaciones circenses. Su madre estaba segura que el raro defecto físico de su hijo fue debido a que en el momento cuando estaba embarazada vio como un león atacó al papá de Lionel, citó el Daily Star.
La actividad circense de Stephan comenzó desde que tenía 4 años de edad cuando un empresario alemán llamado Sedlmayer lo reclutó para formarlo dentro de la vida del entretenimiento y de la actuación. Entonces el joven Stephan fue instruido en la gimnasia donde aprendería varios trucos que los harían una de las mayores atracciones de entretenimiento.
La muerte de “Lionel, el hombre con cara de león”
La fama internacional llegó a Lionel lo que le valió viajar por toda Europa su buen carácter y su agradable personalidad convirtieron a aquel niño que nació lleno de cabello en todo un éxito en el continente. Pero tal fue su fama que Stephan Bibrowski llegó al “nuevo continente”.
En 1901, Lionel cruzó el Atlántico para presentarse en Estados Unidos. El Barnum and Bailey Circus fue el escenario donde el talentoso joven fue presentado, y casi dos décadas después, Lionel se estableció en Coney Island de la ciudad de Nueva York.
Pero a finales de la década de 1920, Lionel regresó al continente europeo y radicó en Alemania, donde dos años después, en 1932, el destacado artista circense sufrió un paro cardíaco que le quitó la vida a los 41 años de edad.
Rodrigo Mendoza González
Fuente: El Heraldo de México