El caso causó conmoción en el municipio de Zapopan.
De un pozo de casi 20 metros de profundidad salía todo un enjambre de moscas. El desagradable olor que llevaba hacia el predio abandonado donde partían los insectos comenzó a alertar a los vecinos del pueblo La Primavera ubicado en el municipio de Zapopán en Jalisco. En una primera especulación, los habitantes pensaban que quizás alguna vaca había caído al predio y por consiguiente sus restos seguían en el lugar.
Pero al revisar el pozo, las autoridades se percataron que se trataba de una espeluznante escena salida de una película de horror, al encontrar varias bolsas de basura apiladas que durante varios meses habían permanecido intactas en el sitio. Al revisar el contenido de los plásticos, se descubrió que lo que en realidad provocaba el hedor era debido a que había restos humanos dentro.
Tras hacer una revisión exhaustiva, la policía encontró 119 bolsas con restos humanos. Y en el primer reporte del Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses informaron que al menos había 44 cuerpos, pero advirtió en aquel septiembre de 2019, que el número de cuerpos hallados podría aumentar todavía,
“El pozo de los horrores” en Zapopan
Al respecto, la organización civil Familias Unidas por Nuestros Desaparecidos Jalisco (Fundej) consideró que se trató de la mayor fosa clandestina localizada en la entidad. Medios locales llamaron a aquel predio como “El pozo de los horrores”.
En las inmediaciones del pueblo La Primavera está ubicado el predio abandonado que se compone de alrededor de cuatro hectáreas, el cual está cercado por un muro de adobes y dentro de la zona hay una caballeriza que quedó a media construcción, y ahí muy cerca está ubicado el pozo que contenía los restos humanos, según reportes de la BBC.
Durante varios años, el predio fue abandonado. Se ubica en el camino de acceso hacia el Bosque de la Primavera, la cual es el equivalente a Chapultepec en la Ciudad de México, ya que es la zona con mayor extensión de áreas verdes en la zona metropolitana de Guadalajara.
Los vecinos cruzaban a menudo la propiedad que quedé sin edificarse, ya que ayudaba a cortar camino rumbo al pueblo, además que era idóneo para llevar al ganado a pastar. Pero desde hacía varios días se presentó una plaga de moscas alrededor del predio abandonado que se complementa con los fuertes olores que se agudizó con la caída de las lluvias.
La excavación final donde se terminó de identificar las bolsas llenas con restos humanos tardó una semana completa. “La gente no sabe quién arrojó las bolsas. Algunos dicen que vieron a jóvenes llegar con las bolsas pero nada más”, dijo un periodista local consultado por el medio citado.
Toda una operación narco en el bosque
Pero dentro del Bosque de La Primavera se encontraron además varias fosas clandestinas, as como narcolaboratorios para la elaboración de drogas sintéticas como el cristal o las anfetaminas, actividad que es realizaba por grupos de narcotraficantes de la zona.
Fue durante los meses de marzo y abril cuando se presentaron grandes incendios forestales, los cuales revelaron que varios narcos estaban en el lugar, ello debido a que los servicios de emergencia de Bomberos y Protección Civil municipal no pudieron pasar porque fueron detenidos por civiles armados que resguardaban la zona.
Francisco Jiménez Reynoso, investigador del Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades de la Universidad de Guadalajara, afirmó que es la propia gente la que se da cuenta en primera instancia de que algo anda mal en la comunidad:
“Todos los hallazgos son por denuncias de ciudadanos, como fue en este caso. El común denominador es que la gente huele mal en su entorno, hay olores fétidos, denuncian a las autoridades y es hasta ese momento que acuden a esos lugares”.
Rodrigo Mendoza González
Fuente: El Heraldo de México