Pese a cerco en internet, persisten acciones para desalentar inmunización; expertos ven en bloqueo oportunidad para la salud
Desde el inicio de la pandemia, los antivacunas han sido relegados al olvido del algoritmo de búsqueda de internet, para evitar la difusión de sus ideas y, con ello, no atraer a más desertores de la inmunización.
Mientras, en la vida real, tras la aplicación del biológico en al menos 94 por ciento de la población adulta del país, algunos de sus detractores han sufrido las restricciones momentáneas que trae consigo la falta de vacuna, como el impedimento para viajar fuera del país o ingresar a centros recreativos en Puebla y Jalisco.
El cerco en contra de los antivacunas también se ha puesto en práctica en las redes sociales: en septiembre del año pasado, YouTube anunció el bloqueo de contenidos de esta índole. Mientras que el Centro para Contrarrestar el Odio Digital, en Londres, identificó que sólo 12 personas generaban 65 por ciento de la propaganda en contra de la inmunización.
En las redes sociales, existen grupos como Efectos secundarios por las vacunas en México, que tiene más de dos mil seguidores, mientras que en Telegram, Médicos por la verdad México, donde se presentan teorías contra la inoculación, llega a los 27 mil usuarios.
En materia laboral, han ocurrido posturas encontradas, pues mientras la Organización Panamericana de la Salud (OPS) insiste en lo benéfico que sería que la vacuna contra la COVID-19 fuera obligatoria, y la OMS señala que hay circunstancias específicas en que los gobiernos tendrán que exigir estos requisitos, en México, la Procuraduría de la Defensa del Trabajo defiende la decisión de los antivacunas y les asegura no ser despedidos por dicha causa.
No obstante, el uso del cubrebocas, el certificado de vacunación y otras medidas ocasionaron al menos dos manifestaciones antivacunas en la CDMX.
Alejandro Sánchez, investigador del Consorcio Mexicano de Vigilancia Genómica, insistió en la importancia de la vacunación. Advirtió que el sistema de salud puede colapsar por los millones no vacunados. Recalcó que la desinformación es la mayor causa de la deserción, y no descartó que el bloqueo en redes sea de gran ayuda.
PAL
Frida Valencia
Fuente: El Heraldo de México