En distintas acciones realizadas en San Luis Potosí, autoridades estatales y federales lograron liberar a más de 50 personas víctimas de distintos delitos.
Las autoridades de San Luis Potosí buscaban el jueves por tierra y aire a más de 20 personas que viajaban en dos camionetas y que fueron denunciadas como desaparecidas a su paso por el estado, pero en esas labores localizaron a 51 supuestas víctimas de diferentes delitos, dijo el gobierno federal en un comunicado.
Lo curioso es que nadie había reportado la desaparición del resto de personas, que las autoridades solo identificaron a uno de los individuos localizados y que durante dos días se sucedieron informaciones contradictorias en una zona de México que es una ruta clave hacia Estados Unidos y de intensa actividad del crimen organizado.
Todo empezó el martes, cuando la empresa de renta de vehículos y servicios de turismo Grupo Eifel denunció el secuestro de más de 20 personas, incluidos dos de sus empleados que viajaban en dos camionetas de la compañía con destino a Saltillo, Coahuila.
Según explicó el representante legal de la empresa, Adrián González, el grupo, formado por hombres adultos, había salido el lunes por la mañana de San Felipe, Guanajuato, en una camioneta con capacidad para 15 personas y en otra de seis pasajeros, la primera de ellas con GPS.
Durante la madrugada del martes se dieron cuenta de que el vehículo con localizador estaba parado en San Luis Potosí, lo que preocupó a la empresa. La alarma creció al no poder contactar a los conductores.
González explicó que uno de sus hermanos recibió una llamada de quien contrató el servicio, que era uno de los pasajeros, en la que decía que individuos del crimen organizado los habían capturado y que pedían 60 mil pesos por cada uno para liberarlos. También contó que a los choferes los tenían en un lugar aparte.
González, que dijo desconocer a qué se dedicaba quien contrató sus servicios, presentó el martes una denuncia en la fiscalía de Guanajuato y se comunicó con la Guardia Nacional, que ese mismo día localizó una de las camionetas en Matehuala, en San Luis Potosí, pero sin nadie a bordo, según el reporte del cuerpo militar que González recibió.
Cuando la denuncia trascendió públicamente el miércoles, las autoridades gubernamentales de Guanajuato y San Luis Potosí anunciaron trabajos conjuntos de rastreo, a los que posteriormente se unieron fuerzas federales, pero en el operativo se dio con más gente de la que buscaban.
La fiscalía de San Luis Potosí dijo el miércoles que localizó a 16 individuos víctimas de robo, y el jueves apuntó que halló a dos grupos de posibles migrantes que estaban retenidos, además de incautar cinco camionetas y armas largas.
Las autoridades no aclararon si se trataba de las personas que fueron denunciadas como desaparecidas por el Grupo Eifel hasta que un comunicado emitido por el gobierno federal el jueves en la noche identificó a Luis Felipe Macías Arriaga, el conductor de uno de los vehículos que supuestamente llevaba a los migrantes.
González confirmó que Macías Arriaga era el chofer de una de sus camionetas y, tras hablar con los familiares de algunos de los desaparecidos en los últimos días, indicó que los pasajeros no eran migrantes indocumentados sino vecinos de ranchos de Guanajuato. Desconocía si planeaban emigrar a Estados Unidos porque solo dijeron que iban a Saltillo a trabajar, señaló.
“Esperamos ya tener comunicación con nuestro operador, que nos narre su experiencia” y tener más información para aclarar lo ocurrido, afirmó el empresario, que dijo que nunca había vivido una situación similar.
Con información de AP
José Arrieta
Fuente: El Heraldo de México