Madrid. Edmundo González Urrutia, el opositor venezolano de 75 años que concurrió a las elecciones presidenciales del pasado 28 de julio, se convirtió ayer en exiliado político en España, estatus que le concedió el gobierno del socialista Pedro Sánchez, quien se refirió a él como héroe
y gracias a la intervención crucial
del ex mandatario José Luis Rodríguez Zapatero.
González permaneció oculto desde las elecciones y en las últimas semanas se refugió en la sede de la embajada de Países Bajos en Venezuela, desde donde fue trasladado el jueves a la representación diplomática española, precisamente cuando ya se le había prometido el asilo político.
Acompañado de su esposa, Mercedes López, y del secretario de Estado de Asuntos Exteriores y Globales de España, Diego Martínez Belío, González viajó en un avión del ejército español, hizo escala en Santo Domingo e Islas Azores y aterrizó en el aeropuerto militar de Torrejón de Ardoz, en Madrid.
En sus primeras declaraciones desde España, el político denunció haber sufrido coacciones y amenazas
para no permitir
su salida del país. En un mensaje de audio de 40 segundos difundido por su equipo de campaña, González afirmó que su partida estuvo rodeada de presiones, coacciones y amenazas
, y añadió: confío en que próximamente continuaremos la lucha por lograr la libertad y la recuperación de la democracia en Venezuela
.
Edmundo González se suma así a una larga lista de líderes venezolanos que se encuentran en España y que maniobran desde aquí para derrocar al gobierno de Nicolás Maduro, entre ellos el ex líder Leopoldo López y su esposa, Lilian Tintori; el ex alcalde de Caracas Antonio Ledesma; el ex presidente del Parlamento venezolano Julio Borges; el ex general Miguel Rodríguez Torres, acusado de conspiración contra el gobierno de Maduro cuando fue ministro del Interior y de Justicia y por lo que estuvo encarcelado en 2018, y el activista Loren Saleh, acusado de planear actos terroristas contra el Estado
.
El ministro de Asuntos Exteriores de España, José Manuel Albares, confirmó que la petición de asilo fue por solicitud suya
y que la hizo llegar a la diplomacia española cuando se encontraba refugiado en en la embajada de Países Bajos en Venezuela. Albares aseguró que no hubo ningún tipo de negociación política con el gobierno de Maduro, lo que contradice las afirmaciones hechas desde Caracas.
Josep Borrell, máximo responsable de la política exterior de la Unión Europea, señaló que ante la represión, persecución política y amenazas directas contra su seguridad y libertad
, González ha tenido que pedir asilo político y acogerse a la protección que le ofrece España
.
Esta maniobra diplomática enfrentó al gobierno y al mayor partido opositor, el derechista Partido Popular, principal aliado de la oposición venezolana en España, cuyo vocero, Esteban González Pons, afirmó que Sánchez y los oficios corruptos de Rodríguez Zapatero deberían ser parcos en autoalabanzas. Sacar a González Urrutia sin reconocerlo presidente legítimo no es hacerle un favor a la democracia, sino quitarle un problema a la dictadura. Lo mismo haría Cuba si se le pide.
Armando G. Tejeda, corresponsal, y agencias
Fuente: La Jornada