En 2023, solo en Europa murieron 60 mil personas por las altas temperaturas.
Las altas temperaturas quemaban hace un año a China y a Estados Unidos con intensos calores de hasta 50 grados centígrados que en algunos lugares en los hospitales llenaban con hielos las bolsas para cadáveres con el fin de refrescar a los pacientes, o como el caso del Reino Unido, una zona donde prácticamente llueve todo el tiempo, pero que los mercurios de los termómetros llegaron a 40 grados.
Por lo anterior, la BBC llevó a cabo un experimento para conocer la forma como las olas del intenso calor afecta al cuerpo humano, dado que en 2023 tan solo en el continente europeo donde el clima es gélido, se registraron alrededor de 60 mil personas muertas por el calor extremo.
¿En qué consistió el experimento sobre el calor?
James Gallagher, uno de los presentadores del medio británico, fue invitado al experimento realizado por la Universidad de Gales del Sur a cargo del profesor Damian Bailey. Todo comenzó al exponer al periodista a una temperatura inicial de 21 grados centígrados que iría subiendo en intensidad.
La idea del experimento de calor, fue llegar hasta los 35 grados para finalmente exponer al cuerpo humano a estar en una temperatura máxima de 40.3 grados centígrados. “Sudarás y la fisiología de tu cuerpo puede cambiar considerablemente”, advirtió el profesor Bailey a Gallagher.
A través de una cámara medioambiental, el comunicador fue sometido a los cambios de temperatura que pueden ser manipulados dentro que cuenta con paredes de acero brillante, con la puerta pesada que hace sentir como si estuviera mirando hacia dentro de mi horno, acotó Gallagher quien documentó las sensaciones que experimentó.
¿Qué sufre el cuerpo humano con tanto calor?
“Una enorme boquilla analiza el aire que exhalo y un ultrasonido inspecciona el flujo de sangre a mi cerebro a través de las arterias carótidas en mi cuello. Tenemos un ejercicio rápido para el cerebro, memorizar una lista de 30 palabras. Se encienden los ventiladores. La temperatura empieza a subir.
Mi cuerpo tiene el objetivo simple de mantener la temperatura alrededor de mi corazón, pulmones, hígado y otros órganos a unos 37 grados”, detalló Gallagher y agregó:
“Tomamos una pausa a 35°C para hacer más mediciones. Se siente calor ahora. No es incómodo y estoy sentado relajado en una silla. Algunos cambios en mi cuerpo ya están claros. Estoy más rojo”, dijo. De manera que al llegar a altas temperaturas lo que molestó fue la humedad del aire. “Es entonces cuando se torna peligrosa. Nuestra temperatura central empieza a aumentar y puede ocurrir fallo orgánico”, dice la investigadora Rachel Cottle.
La experta agregó que el cuerpo humano puede aguantar hasta 37 grados sin presentar complicaciones en la salud, pero al llegar a los 40, comienzan los desmayos y a dañarse los tejidos del corazón y el cerebro hasta llegar a un punto que resulta fatal, situación que se presenta con los golpes de calor.
Rodrigo Mendoza González
Fuente: El Heraldo de México