Haitianos que se dirigen a la frontera sur de Estados Unidos, mientras miles de sus compatriotas fueron expulsados de un campamento fronterizo en Texas, están pensando en buscar trabajo en México si las medidas para frenar la entrada al país del norte siguen siendo estrictas.
Durante semanas, los haitianos han estado huyendo del caos económico, político y social en su tierra natal; miles están atravesando Centroamérica y México, con la esperanza de llegar a Estados Unidos para lograr una mejor vida.
Tras la negativa de EU ha recibirlos, ellos se han dispersado por el norte del México, lo que ha generado preocupación de que los cruces masivos, como los que se ven en Ciudad Acuña, Coahuila, puedan ocurrir en otros lugares.
En Monterrey, Nuevo León, se han reunido unos dos mil haitianos, según recuentos de refugios para migrantes.
Marck Lender, haitiano de 30 años que viajó desde Chile, dijo que esperará hasta obtener los papeles necesarios para legalizar su estadía.
“Si encuentro trabajo en México, me voy a quedar”, dijo.
Roberson, un soldado haitiano de 42 años que llegó desde Brasil, dijo que estaba harto de pagar dinero a “guías” y que acababa de presentar una solicitud de asilo en México, quiere trabajar en Tijuana o Mexicali.
La semana pasada, afuera de las oficinas de la COMAR en Ciudad de México se formaron largas filas de migrantes, en su mayoría haitianos.
En Monterrey, muchos de los haitianos que llegaron al albergue han expresado interés en conseguir documentación que les conceda permiso para trabajar en el país.
Lo mismo ocurre en Ixtepec, Oaxaca, los extranjeros no sólo buscan estadía, sino también estudiar una carrera profesional para mejorar su calidad de vida. En Tapachula se estima que hay 35 mil.
Con información de Reuters, AP y Rusvel Rasgado
Fuente: El Heraldo de México