Inseguridad, factor para tensión entre México y EU

Advierte informe del Congreso de Estados Unidos

En febrero pasado, el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, pidió a través de Twitter mayores medidas de protección a los periodistas mexicanos.

La demanda de drogas en los Estados Unidos, así como el contrabando de dinero en efectivo y de armas a México desde los Estados Unidos, han alimentado la violencia relacionada con el narcotráfico en México”.  

Servicio de Investigación del congreso de EU.

El tema de la inseguridad pude provocar que durante el 2022 las relaciones entre México y Estados Unidos se tensen, advierte un informe del Servicio de Investigación del Congreso estadounidense.

En el reporte denominado “México: antecedentes y relaciones con Estados Unidos”, se refiere que durante más de una década los homicidios en México han ido al alza, impulsados en gran parte por la actuación del crimen organizado al cual se le atribuyen, según datos de Lantia Consultores, que se citan en el reporte, 23,525 homicidios en el 2021.

Para dicho año, cabe mencionar, se registraron de acuerdo con el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, 33,315 víctimas de homicidio doloso en el país.

“La demanda de drogas en los Estados Unidos, así como el contrabando de dinero en efectivo y de armas a México desde los Estados Unidos, han alimentado la violencia relacionada con el narcotráfico en México durante más de una década. La violencia reciente puede atribuirse a la competencia por la producción (entre cárteles) y el tráfico de opioides sintéticos”, se precisa.

En el reporte se acota que si bien el gobierno mexicano ha enfocado esfuerzos en atender a los sectores más vulnerables aún no hay información disponible sobre la efectividad de dicha estrategia.

“La administración (de López Obrador) lanzó un programa que brinda becas a jóvenes para asistir a la universidad o completar pasantías. Nadie ha evaluado los efectos del programa sobre la empleabilidad de los jóvenes o la prevención del delito y los auditores han descubierto irregularidades en la implementación del programa”, se indica.

A su vez el análisis indica que desde el gobierno mexicano se ha dado la orden a las fuerzas de seguridad de no hacer uso de la fuerza, con el objetivo de que disminuyan las víctimas civiles que resultan de esas operaciones.

“Los informes sugieren que a medida que disminuyeron las operaciones federales, las organizaciones criminales comenzaron a usar tecnología cada vez más letal, como bombas montadas en drones, para expandir su territorio”, se indica.

Aunado a esto, las fuerzas policiales estatales y municipales, encargadas de indagar la mayoría de los ilícitos en el país han recibido menos apoyo del gobierno federal durante la administración del presidente López Obrador que durante las administraciones anteriores.

Violencia a comunicadores

Otro factor que provocaría que las relaciones bilaterales se tensen es, por una parte, el reconocimiento del gobierno estadounidense de la crisis de violencia hacia periodistas y, por el otro, las críticas del gobierno mexicano sobre el financiamiento de EU a las organizaciones civiles que indagan corrupción.

“El gobierno sigue recibiendo críticas por no proteger a periodistas, defensores de derechos humanos, migrantes, y otros.

“Los críticos del presidente (Andrés Manuel) López Obrador lo han acusado de promover un ambiente de intimidación y autocensura mediática al continuar agrediendo verbalmente a los periodistas”, se indica.

Financiamiento

En el informe se divulgan datos sobre recursos otorgados por el gobierno estadounidense a México para el combate a los narcóticos y la inseguridad, así como apoyos económicos, y los cuales, durante los años fiscales del 2019 al 2022 de Estados Unidos —durante la administración lopezobradorista— ascenderían a más de 500 millones de dólares.

De acuerdo con el reporte dichos recursos se dividen en Fondo de Apoyo Económico; Control Internacional de Narcóticos y Cumplimiento de la Ley; Financiamiento Militar Extranjero; Educación y entrenamiento militar internacional y el Programa de no proliferación, antiterrorismo, desminado y relacionados.

Fuente: El Economista