Se trata de Julia Pérez Carrizoza, Coordinadora de la Zona Urbana de Participación Ciudadana quien se la jugó con Mingo mientras decía trabajar para Gerardo
Los Mochis, Sinaloa. – El expediente es claro. Los registros de la traición son evidentes. Julia Pérez Carrizoza es apenas uno de los ejemplos de la traición al proyecto de Gerardo Vargas Landeros en Ahome.
Su actividad a hurtadillas fue revelada, y una vez descubierta, intenta negar que mantenía contacto directo, durante todo el proceso electoral y previo a él, con personal del primer círculo del candidato perdedor José Domingo Vázquez Márquez.
La inclusión en el equipo de campaña de Vargas Landeros, aprovechando su papel como Coordinadora de las líderes de colonias, fue utilizado por Julia para beneficio de los contrincantes electorales de Gerardo, para filtrar documentos y jugarle las contras a quien hasta ese momento era su jefe político.
Parte del que fue su equipo reporta de manera documentada que Julia “entregó comités y documentos de trabajo del equipo de Vargas a los simpatizantes de Vázquez, buscando asegurar su futuro profesional sin importar el resultado electoral, evidenciando su falta de ética monumental”.
Incluso se confirma que como parte de la estrategia para agregarle adeptos a la candidatura de Mingo Vázquez en sus faenas electorales, operaba al interior de su equipo con una cadena de humillaciones y prepotencia que decía provenía “desde arriba”, y así hacer que sus operadoras no impulsaran el proyecto de Vargas Landeros a la Alcaldía.
Se trataba, ayudada por Herlinda y Wendy, de crear un ambiente de animadversión que favoreciera a Mingo Vázquez ante la promesa de mejores condiciones futuras labores y profesionales para ellas.
Julia Pérez, era obvio, sucumbía antes las promesas y se convertía, inspirada por la deslealtad, en doble agente de la campaña electoral a la Alcaldía.
Ahora finge ser la aliada perfecta. La Operadora experta que la llevó en esta administración municipal a ocupar la Coordinación de la Zona Urbana de Participación Ciudadana.
Julia Pérez sigue mutando. Quiere esconderse y con descaro intenta al estilo de Judas besar la otra mejilla de Gerardo Vargas Landeros.
