Miles de mujeres de los 31 estados del país salieron ayer a las calles para exigir, en el contexto del Día Internacional de la Mujer, un alto a la violencia de género, a los feminicidios y a las desapariciones, asimismo, que no haya impunidad para los agresores y que sean escuchados por las autoridades los reclamos, tanto de las víctimas como de sus familiares. Acompañadas por integrantes de organizaciones civiles y parientes de las víctimas se unieron en una sola voz para reclamar a los gobiernos justicia para las que ya no están.
En Zacatecas, policías estatales violentaron el contingente nutrido por estudiantes, empleadas gubernamentales, obreras y hasta mujeres de la tercera edad que participaron en la marcha por el 8M, cuando varias de ellas se acercaron a las vallas metálicas ubicadas frente al palacio de gobierno, para arrojar piedras y bolsas de pintura.
Decenas de uniformados, al mando del general Arturo Medina Mayoral, secretario de Seguridad Pública de Zacatecas, portando escudos, toletes y extintores, agredieron y detuvieron a por lo menos 30 jóvenes, aunque más tarde trascendió que la mayor parte de ellas habrían sido liberadas. Reyes Muguerza justificó la represión policiaca contra las integrantes del denominado Bloque Negro
, y aseguró que tres mujeres policías habían sido heridas de gravedad
. Explicó que dos fueron descalabradas y una más fue atacada con gas pimienta, aunque las atendieron en el sitio paramédicos de la Cruz Roja.
Detienen a fotoperiodistas
Las fotoperiodistas Flor Castañeda, de El Sol de Zacatecas; Jesse Mireles, del diario NTR, y Nayeli deLeón, de Página 24, fueron deteni-das con violencia y subidas a patrullas por tomar fotografías de las agresiones.
En Puebla, policías estatales lanzaron gas lacrimógeno y chorros de agua a las jóvenes que participaron en la movilización. Las inconformes retiraron parte de las vallas colocadas frente al palacio municipal. Una mujer identificada como Michelle Romero, fue detenida a jalones y hasta el cierre de la edición no había sido liberada.
En el zócalo de la capital poblana, alrededor de las 17 horas coincidieron dos manifestaciones, la del Frente Feminista Radical, Morras Sororas y Ajolotas Revolucionarias y la de alumnas de las universidad es Autónoma de Puebla, Iberoamericana y Popular Autónoma del Estado de Puebla. Ambas agrupaciones lograron retirar parte de las vallas metálicas que el ayuntamiento, encabezado por el edil panista Adán Domínguez, mandó colocar para cubrir la fuente de San Miguel y la fachada del palacio municipal.
En ese sitio, la situación se tornó más violenta, pues los uniformados que permanecían atrás de las vallas respondieron con chorros de agua y gases lacrimógenos y sujetos no identificados con vestimentas blanca, azul y mostaza, golpearon a las jóvenes. Hombres infiltrados intentaron derribar las vallas. Las manifestantes también rompieron vidrios del recinto municipal.
Los agentes intentaron llevarse al reportero Israel Flores, pero compañeros de distintos medios lo liberaron; a los periodistas les lanzaron agua y los gasearon
, pese a mostrar sus acreditaciones.
Desmanes y vandalismo en Hidalgo y Guanajuato
En Pachuca, jóvenes del colectivo Marea Verde, Bloque Negro y otras agrupaciones feministas destrozaron los cristales de los accesos del palacio de gobierno de Hidalgo. Lanzaron estopas con gasolina con llamas dentro del vestíbulo. En Plaza Independencia las feministas destrozaron las puertas del re-loj monumental de Pachuca y lo vandalizaron.
También tiraron y pintaron consignas en las letras de metal del nombre de la ciudad de Pachuca.
En las inmediaciones del reloj monumental, un hombre que conducía una camioneta fue apaleado por integrantes del Bloque Negro. Quedó inconsciente dentro del vehículo, el cual quedó destrozado.
Las jóvenes aseguraron que el conductor las insultó y les aventó el auto para atropellarlas. En Tlaxcala, Ana Laura Vázquez, corresponsal de un medio nacional, recibió golpes de una joven, mientras otras intentaron arrebatarle su teléfono celular.
En Guanajuato, por segundo año consecutivo, las mujeres incendiaron la puerta de la presidencia municipal de León. En Celaya, un joven resultó con lesiones y sufrió una convulsión durante la movilización por lo que tuvo que ser trasladado a un hospital. Las reporteras que realizaron transmisiones en vivo fueron agredidas por las feministas.
En el palacio de gobierno de Colima, elementos de seguridad arrojaron dos granadas de gas lacrimógeno a las mujeres que le prendieron fuego a las puertas y derribaron las vallas colocadas.
La entidad tiene el mayor índice de feminicidios en el país por el número de habitantes y desde 2017 tiene Alerta por Violencia de Género. También hubo movilizaciones en Aguascalientes, Baja California, Baja California Sur, Campeche, Chiapas, Chihuahua, Coahuila, Durango, estado de México, Guerrero, Jalisco, Michoacán, Morelos, Nuevo León, Nayarit, Oaxaca, Querétaro, Quintana Roo, San Luis Potosí, Sinaloa, Sonora, Tabasco, Tamaulipas, Yucatán y Veracruz.
Fuente: La Jornada