Es necesario implementar mecanismos que ayuden a no afectar el suelo y a su vez regenerarlo, evitando el uso de agua de mala calidad para que no se salinice, el riego excesivo que tiende a erosionarlo, así como la quema de soca debido a que disminuye la cantidad de materia orgánica, destacó el doctor Azareel Angulo Castro, profesor investigador del área de suelos y agua de la Facultad de Agronomía de la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS).
Explicó que en Sinaloa el suelo está conformado básicamente de arcilla y tierra muerta, como se conoce comúnmente, que son suelos de aluvión, fértiles para la producción, que a pesar de ser muy profundos se debe de evitar el uso excesivo de riego rodado y tratar de tener suelos más nivelados para impedir que sigan degradándose.
El investigador señaló que actualmente está en auge la agricultura regenerativa, que consiste en rehabilitar el suelo y mantenerlo productivo el mayor tiempo posible, debido a que este es la infraestructura principal para que se dé la actividad de la agricultura con ello la producción de alimentos.
Finalmente, y en relación al impacto del cambio climático, el doctor Angulo Castro dijo que se están observando lluvias en exceso, que arrastran las partículas del suelo provocando una enorme erosión; en el caso de la sequía, el agricultor hace uso de pozos, los cuales en muchas ocasiones son salinos, y en lo relacionado al calor, expuso que estos provocan mucha actividad microbiana reduciendo el porcentaje de materia orgánica en el suelo por las altas temperaturas.