Océano Atlántico con altas probabilidades de ser absorbido por un “Anillo de Fuego”, revela investigación

Una zona de subducción sería la responsable de ocasionar este reajuste en las placas tectónicas.

El Oceáno Atlántico tiene altas probabilidades de desaparecer y ser absorbido por un “Anillo de Fuego” en un futuro remoto, así lo reveló la investigación de la Facultad de Ciencias de la Universidad de Lisboa, gracias a la cual se identificó una zona de subducción entre España y Marruecos. Dicha zona está situada debajo del Estrecho de Gibraltar, en donde se conecta el Mar Mediterráneo con el Océano Atlántico, y su canal tiene 58 kilómetros de longitud y 13 kilómetros de ancho. 

Joao Duarte, investigador principal, utilizó junto a sus colegas un modelado por computadora para estudiar el desarrollo de esta región y calcular su futuro comportamiento, lo que los llevó a la conclusión de prever un drástico cambio para el segundo océano más extenso del planeta dentro de 20 millones de años. 

Habrán grandes cambios en el planeta Tierra en un futuro distante
FOTO: Especial

Océano Atlántico desaparecerá en un futuro distante 

“La zonas de subducción causan que los océanos se cierren empujando al suelo del océano de vuelto a su manto, lo que reúne a los continentes en una misma región”, explicó Duarte al DailyMail. 

En este sitio, la Placa Africana se encuentra debajo de la Placa Euroasiática, lo que provoca alta incidencia de actividad sísmica. Sin embargo, actualmente su velocidad en la que se ha estado desplazando ha sido considerablemente lento. Aún así, su tamaño actual, alrededor de 200 kilómetros de longitud, podría llegar hasta 800 kilómetros. 

Cuando cumpla su recorrido, se conformará lo que se denomina como el “Anillo de Fuego”, nombrado por el “Cinturón de Fuego” que existe en el Pacífico, reconocido también como una importante zona de abducción por su amplia actividad sísmica y volcánica. 

“Los resultados sugieren que el arco se propagará adentrándose al Atlántico después de un periodo de quietud”, explican los investigadores en su publicación de la revista científica Geology. 

EDG

Enrique Delgado

Fuente: El Heraldo de México