Al 2024 se logrará la autosuficiencia alimentaria para las familias rurales, que estas produzcan su propio maíz y no tengan la necesidad de comprarlo en los mercados a altos precios, y para el 2030, con los gobiernos de la Cuarta Transformación, se buscará ampliarla a todo el país, informó la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader).
Esto no significa que se producirá todo el maíz que requiere el consumo nacional, hay suficiente maíz blanco para consumo humano, hay excedentes de esta producción que se va uso pecuario e incluso a exportación, de lo que hay déficit es de maíz amarillo para el sector pecuario, esta producción no se logrará sustituir sino en un plazo mayor, en 2030, explicó el subsecretario de Autosuficiencia Alimentaria, Víctor Suárez.
En conferencia de prensa virtual apuntó que el programa Producción para el Bienestar apoya a 1.5 millones de pequeños de hasta 20 hectáreas, de los cuales 1.1 millones son de maíz, y producen en alrededor de 5 millones de hectáreas, generan 11 millones de toneladas de maíz, un 35 por ciento de la producción nacional.
Ante las siembras del ciclo primavera verano que se realizan en estas fechas, agregó que actualmente hay problemas de sequía en algunos estados, sobre todo del norte del país, hay un temporal irregular, pero no es una situación catastrófica porque las tormentas tropicales han establecido una normalidad en la mayor parte de las regiones agrícolas en el temporal.
En relación con el aumento de precios de fertilizantes hay tres acciones, por un lado el programa de fertilizantes para el bienestar se amplió a 9 estados; se eliminó una cuota compensatoria a la importación de sulfato de amonio, que permitió reducir los costos del fertilizante en 30 por ciento, y hay 2 mil 500 biofabricas de insumos en las llamadas escuelas de campo y hay manuales para la preparación de bioinsumos. “Con estas acciones se apoya que los niveles de nutrición a los cultivos se mantengan y avanzar a la transición agroecológica”.
Angélica Enciso L.
Fuente: La Jornada