Revelan qué es el enorme “barco” que aterró a los curiosos tras aparecer en una playa

Solo se puede ver cuando hay marea baja, ha estado desde hace más de un siglo

La estructura de una embarcación en Washington, Estados Unidos, causó extrañeza e incluso episodios de ansiedad en los curiosos que fueron testigos del denominado “barco de cemento” que apareció un día en la playa de la capital estadounidense en la década de 1960, aunque su presencia se registró desde hace más de un siglo, siendo un misterio hasta estos días.

La embarcación apareció en las afueras de la ciudad de DuPont, y ante el embate de las olas del mar, el navío ha permanecido aún cuando fue partido por la mitad, pero siempre encallado en la arena con sus más de 30 metros de extensión.

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La nave mide más de 30 metros. Foto: Reddit / BingErrDronePilot

¿De dónde vino el barco de cemento?

El navío fue reconocido como “El Capitán Baker”, y era parte de los seis barcos de hormigón (por la base de concreto que le colocaron al ser construido) que fueron parte de un experimento de corta duración llevado a cabo hace más de un siglo, el cual solo puede observarse cuando hay marea baja.

El origen de la misteriosa estructura de concreto para navegar en el océano, fue parte de un audaz intento del gobierno de Estados Unidos para construir “barcos cisterna” de hormigón para transportar principalmente agua dulce por toda la costa del país norteameicano tras la Primera Guerra Mundial, según reporta el Daily Mail.

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El barco solo puede mirarse cuando hay marea baja. Foto: YouTube / joelnert

Mitos detrás de los barcos de hormigón

Al respecto, los blogueros Richard Lewis y Erlend Bonderud, coincidieron en la historia de la construcción de los barcos de hormigón ante la escasez que sufría Estados Unidos:

“Las condiciones generales en ese momento, las que llevaron al programa estadounidense de construcción de barcos de hormigón, fueron la escasez de barcos durante la guerra, combinada con una escasez de acero”, indicaron en torno a la verdad sobre las historias fantásticas sobre ese tipo de navíos por la presencia de fantasmas y el mal augurio.

Rodrigo Mendoza González

Fuente: El Heraldo de México