Ayer por la noche, Rusia envió 18 misiles de diferentes tipos en el octavo ataque en un mes que hace sobre la capital ucraniana.
Rusia atacó con todo su arsenal a la capital ucraniana Kiev la noche del martes a través de drones, cohetes y misiles hipersónicos de las Fuerzas Armadas que resultó devastador al ser calificado como “un ataque excepcional”. En el marco de la octava vez que el Kremlin ataca la principal ciudad de Ucrania, el presidente Vladimir Putin prepara un arma “acuática” que podrá superar los sistemas de defensa “de cualquier enemigo”.
Ucrania indicó que durante el asalto ruso en Kiev, las defensas lograron neutralizar y derribar a seis misiles hipersónicos Kinzhal, aunque Rusia negó que así haya ocurrido por lo que impactaron en sus blancos que provocó que sonaran las sirenas de ataque aéreo en todo Ucrania, según información del Daily Star.
Testigos afirmaron que escucharon cerca de 10 explosiones alrededor de la ciudad, reportó Al Jazeera. El jefe de la administración militar en Kiev, Serhiy Popko, aseguró en Telegram que el ataque de misiles de Rusia: “fue excepcional en su densidad: el número máximo de misiles de ataque en el menor período de tiempo”.
Por su parte, Valerii Zaluzhnyi, comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas de Ucrania, afirmó que los 18 misiles fueron derribados por las defensas aéreas de la ciudad, acción que fue aclamada por el Ministro de Defensa de Ucrania, Oleksii Rexnikov como un “éxito increíble”.
La poderosa nueva arma de Putin
Según informes de inteligencia citados por el medio ruso Izvestia, el Kremlin prepara una nueva arma, un nuevo misil nuclear submarino que será capaz de superar todos los sistemas de defensa que hará que lleven a cabo ataques imparables. Al respecto, el Ministerio de Defensa ruso dijo que el misil balístico intercontinental (ICBM) que es lanzado desde submarinos, se encuentra en su fase de desarrollo.
El plan del Ejército ruso es que el nuevo misil reemplace al actual RSM-56 Bulava que tiene capacidad nuclear. El almirante Nikolai Yevmenov, comandante en jefe de la Armada rusa, aseveró que el nuevo misil superará en maniobras a los sistemas de defensa “de cualquier enemigo”, ya que tendrá un mayor rango de vuelo.
Asimismo, el Ejército ruso informó que el nuevo misil se convertirá en el armamento principal de la futura generación de submarinos rusos. Actualmente está en las etapas de desarrollo. El ex agente de la KGB forma parte de la elaboración de nuevo armamento aún más devastador que desarrollan tras una política naval firmada por Putin en 2017 cuyo objetivo principal es mejorar las capacidades armadas hasta 2030:
“Con el desarrollo de armas de alta precisión, la Marina se enfrenta a un objetivo cualitativamente nuevo: la destrucción del potencial militar y económico del enemigo al atacar sus instalaciones vitales desde el mar”.
La política armamentista surgió luego del hundimiento del submarino de misiles de crucero de propulsión nuclear K-141 Kursk en 2000. La tragedia cobró la vida de 118 miembros de personal naval que viajaban en el submarino que explotó mientras se preparaba para disparar torpedos ficticios.
Rodrigo Mendoza González
Fuente: El Heraldo de México