Violencia aleja a médicos pasantes de comunidades

Facultades de medicina vetan poblados en Jalisco, Chihuahua, Michoacán, Guerrero y Zacatecas

GUADALAJARA. Universidades y escuelas de medicina dejaron de enviar a sus estudiantes a prestar su servicio social en comunidades al interior de los estados debido a la violencia que prevalece en algunas zonas, donde sufren robos, secuestros, agresiones sexuales y asesinatos.

Apenas ayer, el presidente Andrés Manuel López Obrador reconoció la dificultad para que médicos especialistas vayan a zonas marginadas del país por la violencia, situación que pega también a los estudiantes que cursan el último año en las carreras de la salud.

“En la Tierra Caliente, en Buenavista, Michoacán (…) ahí por la violencia se complica aún más el que vayan los especialistas a los hospitales”, admitió el jefe del Ejecutivo federal ayer en su mañanera.

Un ejemplo de ello es Jalisco, donde desde hace tres años la Universidad de Guadalajara (UdeG) —pública— y la Universidad Autónoma de Guadalajara (UAG) —que es privada— dejaron de enviar personal al norte del estado tras el asesinato de un pasante de la carrera de medicina junto con un chofer de una ambulancia entre Fresnillo, Zacatecas, y Huejuquilla en la entidad jalisciense.

Son 10 municipios a los que las universidades y escuelas de medicina jaliscienses dejaron de enviar prestadores de servicio social: Bolaños, Colotlán, Chimaltitán, Huejúcar, Huejuquilla el Alto, Mezquitic, San Martín de Bolaños, Santa María de los Ángeles, Totatiche y Villa Guerrero.

En entrevista telefónica con Organización Editorial Mexicana (OEM), Francisco Muñoz Valle, rector del Centro Universitario de Ciencias de la Salud de la UdeG, confirmó que la decisión permanecerá en tanto no cambien las condiciones de seguridad en la zona y haya mejoras en el equipamiento de los Centros de Salud.

En Chihuahua, donde hoy se publicaron las sedes para los pasantes de servicio social, la Universidad Autónoma de Chihuahua y la Secretaría de Salud del Estado acordaron dejar de enviarlos a por lo menos 30 localidades en la Sierra Tarahumara por las agresiones o situaciones de riesgo en contra de personal médico.

La suspensión, que data de 2022, comprende los municipios de Guadalupe y Calvo, Urique, Guazapares, Batopilas, Guachochi, Nonoava y Alvaro Obregón.

El caso que detonó el bloqueo a las comunidades, fue el homicidio de la doctora Massiel Mexía, anestesióloga del hospital rural del IMSS en San Juanito, municipio de Bocoyna, ocurrido en julio de 2022.

En Michoacán, donde el Presidente reconoció problemas de seguridad para el personal médico, las regiones de Tierra Caliente y la costa no son opción para los pasantes de medicina de la Facultad de Medicina de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (UMSNH), reconoció la rectora, Yarabía Ávila

Con base en la asignación de espacios realizados en años anteriores, la rectora afirmó que los jóvenes evitan cumplir con el requisito en municipios como Tepalcatepec, Apatzingán y Coahuayana, Huetamo, Aguililla y Tuzantla.

El director de la Facultad de Ciencias Médicas y Biológicas de la UMSNH, Víctor Hugo Mercado, afirmó que se descartan las plazas donde los pasantes pudieran correr algún peligro.

En Michoacán, a diferencia de otros estados, no se han registrado casos en los que los pasantes hayan perdido la vida o se hayan enfrentado a hechos de violencia de manera directa, sin embargo, en agosto de 2022, el médico encargado, tres pasantes y las enfermeras del centro de salud de Tuzantla, tuvieron que cerrar la clínica durante varios días ante los fuertes y constantes enfrentamientos entre grupos del crimen organizado en la zona.

En enero del 2023, cinco pasantes fueron sacados del municipio de Tepalcatepec ante el clima de violencia que se vivía en ese municipio.

La Universidad Autónoma de Guerrero (UAGro) modificó a partir de este semestre la designación de zonas para que los estudiantes de medicina realicen sus internados o servicio social en hospitales o centros de salud que estén en sus zonas de origen.

“Lo que estamos haciendo en la universidad, es que los jóvenes de la escuela de medicina hagan sus internados en sus regiones, de donde vienen y así evitar que el tema de la inseguridad pueda afectar”, señaló el rector de la UAGro, Javier Saldaña Almazán.

Reconoció que antes el tema de la violencia sí era un problema para la asignación de las plazas que se tenían para que los estudiantes realizarán el proceso de internado y servicio social, que es parte del programa educativo de medicina, pero ahora, la estrategia de enviarlos a sus zonas de origen es más segura y efectiva porque se evitan los desplazamientos.

El rector, señaló que la escuela de medicina de la UAGro, alberga a estudiantes de todas las regiones del estado de Guerrero, por lo que aquellos que son originarios de Tierra Caliente, se quedan en ese lugar.

“Los que vienen de la Montaña y de las demás regiones, también son asignados a los espacios que se tienen en estos municipios conocidos por los propios alumnos”, dijo.

En Zacatecas, son cuatro los municipios en el sur del estado los vetados para pasantes de Unidad Académica de Medicina Humana de la Universidad Autónoma de Zacatecas (UAZ): Villanueva, Mezquital del Oro, Apulco y Noria de Ángeles, reconoció la directora Rosa Martha Covarrubias Carrillo.

La académica señaló que en el último año, cinco estudiantes solicitaron su reubicación debido a amenazas o a que se sentían en riesgo por la presencia de delincuentes en su comunidad.

Una de las comunidades vetadas, es San Antonio de Tarasco, perteneciente al municipio de Villanueva, la cual se ubica a pocos kilómetros de Colotlán, Jalisco. Dicho lugar, en donde viven apenas 500 habitantes, ha sido escenario de hechos violentos como un ataque de civiles armados a elementos de la Guardia Nacional en febrero pasado, que dejó por saldo dos agresores muertos y un agente federal herido.

En Tamaulipas, el Colegio de Médicos del estado propuso a las autoridades implementar un semáforo de seguridad que determine las zonas de riesgo donde no deben ser enviados los estudiantes de medicina que deben realizar sus pasantías.

“Habría que hacerlo a nivel nacional, una especie de semáforo de seguridad para ciertas regiones y en los lugares, donde no hay pues ni modo, no se tiene por qué arriesgar a un estudiante de medicina”, declaró a esta Casa Editora, el presidente del Colegio de Médicos de Tamaulipas, Jorge Rosendo Sánchez Medina.

Recordó que en algunos momentos donde la violencia se recrudeció en Tamaulipas se llegó a recomendar que los estudiantes de medicina no usaran uniformes para no ser cooptados por la delincuencia organizada.

No se tiene que mandar ningún pasante a las áreas donde incluso no puede entrar ni la Guardia Nacional”, apuntó.

Sin embargo, Raúl de León Escobedo, director de la Facultad de Medicina de la Universidad Autónoma de Tamaulipas (UAT) descartó clasificar por zonas de riesgo a los pasantes de medicina.

No hay ninguna plaza etiquetada de antemano como riesgosa, las ponen a disposición las autoridades de la Secretaría de Salud, el IMSS y el ISSSTE”, dijo.

Con información de Víctor Chávez /El Occidental, Sandra Castro y Gabriela Serralde /El Sol de Morelia, Enrique Hernández /El Sol de Acapulco, Ana Vacio /El Sol de Zacatecas

Rafael Ramírez / El Sol de México, Ricardo Holguín / El Heraldo de Chihuahua e Isaura López / El Occidental

Fuente: Sol de México