“La pandemia marcó un punto de quiebre en la forma en que veíamos la actividad empresarial y la seguridad corporativa, en nuestra forma de interactuar empresarialmente, nos advirtió de las complejidades que nos puede acarrear una situación donde pierdes control de lo que tenías planeado como empresa.La pandemia que empezó como una contingencia sanitaria, ha sido una contingencia política, económica y social donde apenas empezamos a medir ciertos impactos. Y estos impactos llevan a que tengas que cambiar tu forma de identificar los riesgos empresariales, de asumirlos y de manejarlos”.
Lo anterior es afirmado por Antonio Gaona Rosete, especialista en seguridad corporativa, y que a partir de su experiencia nacional e internacional como ejecutivo y consultor, agrega que gobiernos y empresas se están enfrentando a situaciones críticas como “la escasez de agua, el incremento del costo de las gasolinas, de los de los alimentos, las consecuencias de la guerra en Europa, y todo esto que viene aparejado, como las migraciones impresionantes”.
Ante este escenario y de cara al Diplomado en Seguridad Corporativa, organizado por la UDLAP Jenkins Graduate School, Gaona Rosete, docente en dicho diplomado, advierte que los directores “que encabecen la seguridad corporativa, deben contribuir con estrategias para asumir estos riesgos globales, requieren de un conocimiento y de un desarrollo profesional mucho más elevado de lo que veníamos observando antes de la pandemia”.
“Hoy en día, agrega el especialista con certificaciones en programas de ataques terroristas y manejo de crisis, nos obligamos a tener una visión mucho más amplia, entendiendo que hoy una empresa está orientada hacia el tema de cómo hacer negocio. Esto implica asumir una conversación que ya no es de cómo prevenir un riesgo empresarial, sino de cómo asumir los riesgos y el impacto que estos puedan tener en la corporación. Esto obliga a que el ejecutivo de seguridad corporativa tenga que agregar más conocimientos a su desempeño, el que conozca el entorno, el contexto, la dinámica de los negocios, y a que adquiriera y desarrolle nuevas formas de conocimiento”.
La empresa Fortinet reveló que tan solo en 2021, México registró 156 mil millones de ciberataques, situándose en el décimo lugar de ciberdelincuencia a nivel mundial. La empresa de seguridad Surfshark contabiliza 16 víctimas por cada millón de intentos de ataque cibernético. También se consideran los riesgos de ciberataques a infraestructuras estratégicas.
Por lo anterior, Antonio Gaona señala que “cuando las empresas buscan contratar a un experto en seguridad, observan el bagaje de conocimientos y la experiencia desarrollada en estas tareas. Se trata de combinar las dos. Lo que obliga a los profesionales a cambiar y mover nuestro lenguaje de manera que lo que aportemos genere una propuesta de valor que que sirva a la organización. Debemos saber cómo se está desarrollando la empresa, si busca una adquisición, una fusión, si tiene un problema financiero. Un experto en seguridad tiene que ganarse un lugar en la toma de decisiones empresariales”.
Finalmente, sobre la aportación de un diplomado como el de Seguridad Corporativa, que comienza en febrero próximo, Antonio Gaona subraya que “nos prepara para poder saber incluirnos en las decisiones de una empresa. Los maestros del diplomado somos profesionales hechos en la seguridad corporativa, somos directivos, somos gerentes. Lo que estamos creando es un espacio donde podamos contribuir a compartir este conocimiento ya adquirido; lo que es sumamente importante, porque al final lo que en las empresas buscan son líderes que agreguen valor ante las crecientes condiciones de inseguridad a nivel mundial”.nformes@udlapjenkins.mx
Fuente: La Jornada